Uno de mis muchos miedos al llegar a Madrid era olvidarme de las estrellas. De levantar la cabeza. Mirar al cielo. Sonreír. Y pensar...
Me gustan las estrellas. Son tan diferentes, y tan iguales. Me gusta mirar al cielo. Cuando lo hago siempre sonrío. Nunca sé muy bien por qué. Pero siempre sonrío. Me gustan las estrellas. Mirarlas todas y no ver ninguna. Verlas todas y mirar sólo una. Saber que están lejos. Saber que lo que veo no es más que lo que fueron y que muchas de ellas ya no lo son. Pero yo las veo… y pienso, y sonrío.
Noche del jueves 14 de abril de 2011. Son alrededor de las nueve de la noche. La temperatura es primaveral y está oscureciendo. La ya centenaria Gran Vía de Madrid está tan viva y ajetreada como siempre. No lo puede evitar. Sigue poniéndose nerviosa cuando hay un estreno. Estoy en la Plaza Callao. Desde aquí veo el Edificio Carrión, más conocido como Edificio Capitol. La ciudad vio crecer sus catorce plantas entre los años 1931 y 1933. En la cabeza del edificio las luces del neón de Schweppes, que ya ha pasado a formar parte de la imagen de la ciudad, juegan unas con otras. En los pies solía albergar una de las salas de cine más importantes de Madrid, los cines CAPITOL.
Bienvenidos a una noche de estreno en Madrid. No hay alfombra roja, ni tampoco hay limusinas, ni relámpagos de flashes que se amontonan unos con otros. Pero es una noche de estrenos. Siéntete importante. Última mirada al cielo. Sí, siguen ahí. Desde Madrid también se ven las estrellas...
Y… ¡allá vamos! Hay una gran masa de personas en las puertas de los cines CAPITOL, más de las esperadas. La cola para sacar las entradas es interminable. La expectación se respira en el ambiente. “¡Córtate!” gritan algunos participantes entre risas mientras se adentran en la maraña de personas que están entrando a los cines. Ese es el nombre de lo que hoy nace. ¡CÓRTATE! Hoy es el estreno, el primero de muchos. El estreno de los estrenos.
Entramos y nos recibe una gran pantalla de cine. Sobrecogedora. Todas las butacas de la zona central de platea están reservadas. Hay actores que van de aquí para allá. Parece normal estar entre ellos pero, para mí, no lo es. ¡Anda! ¡Mira allí! Pero si es Juan Cuesta (José Luis Gil) de “Aquí no hay quien viva”. Y Fidel (Eduardo Casanova) de Aída. ¿Ese no es Alex de la Iglesia? Sí, sí, sí. Es Alex de la Iglesia. Se apagan las luces. Murmullos. Video de presentación. Los pelos de punta. El sonido de una voz nos da la bienvenida. Son cinco cortos y… ¡es hora de empezar!
En las palabras de cada uno de los directores de cortometrajes se intuye el entusiasmo, la energía y la ilusión que han puesto en la realización de sus trabajos. Los cortometrajes abordan temáticas muy diferentes. Con unos te ríes, con otros pasas miedo y algunos te hacen pensar, y mucho. Los hay de todos los colores. Todos diferentes. Para todos los gustos. Y, envueltos en aplausos, llegamos al final de los estrenos, que no de la noche.
La fiesta continúa. Con la entrada de ¡CÓRTATE! hay una consumición gratuita en el Larios Café. Un local que está muy cerca de CAPITOL en el que se puede disfrutar de una copa rodeado de los actores, directores de cortos y demás asistentes del estreno. Los techos son altísimos y la decoración es muy elegante y cosmopolita.
Y os preguntaréis: ¿Quiénes son los responsables de todo esto? Y yo os contesto a modo de cabecera de noticia:
“[ The house of films ] y Raúl Cerezo, codirector del Festival Escorto, lanzan ¡CÓRTATE!, estrenos de cortometrajes mensuales en los cines CAPITOL de la Gran Vía de Madrid. Todos los meses, por el módico precio de 2€, podrás ir de estreno y disfrutar de los últimos cortometrajes producidos en Madrid.”
Y os preguntaréis: ¿Y para cuándo el siguiente? Pues habrá que confirmarlo pero, en principio, tenéis una cita con el cine español el próximo martes 26 de mayo. Será una noche, de estrenos.
Y os preguntaréis: ¿Y para cuándo el siguiente? Pues habrá que confirmarlo pero, en principio, tenéis una cita con el cine español el próximo martes 26 de mayo. Será una noche, de estrenos.
¿Acaso no es genial?
Sí, es demasiado genial.
Tenéis que estar allí. Creedme cuando os digo que esto merece la pena.
Es demasiado. Es vivir un estreno en el corazón de Madrid.
Es, al fin y al cabo, vivir Madrid.
Ahora… os toca a vosotros.
Agradecimientos a Miguel, por enseñarme un pedacito más de Madrid, y a su amiga Adela que nos acompañó durante toda la noche con una sonrisa.